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– El ministerio y la Unción son santas
Yaakov, Béla Orbán
”Ni saldréis de la puerta
del tabernáculo del testimonio, porque moriréis; por cuanto el aceite de la
unción de Jehová está sobre vosotros. Y ellos hicieron conforme al dicho de
Moisés.” (Levítico 10:7)
Esta ley significa que todo
lo que es ministerio y Santo para Dios, en ningún caso debe ser mezclado con lo
que es profano.
El ministerio del Cohén es sólo
una unción que puede funcionar con la autorización y según las leyes de Dios.
Esta orden es todavía válida
hoy.
Cuando Dios, por su Espíritu
Santo, por el Espíritu de Cristo así como por la Unción, nos incita a cumplir
una función o a desempeñar una misión, no puede tener allí pausa ni vacaciones
ni vida privada mientras que el ministerio se termine.
El que pone su vida privada
o lo que sea por encima de su ministerio, es la Unción, el Espíritu de Cristo,
Yeshua HaMashíaj así como el ministerio de Dios que profana.
No puede ser ningún ministerio que viene de sí
mismo o de otros hombres, pero existen unos ministerios fructuosos bajo el
conducto del Espíritu Santo delante o encima de los cuales nada ni nadie puede
colocarse.
Traducción del húngaro: Richard (Zeev Shlomo)
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